Consejos de decoración si vives con mascotas: estilo y practicidad en tu hogar

Tener mascotas no significa renunciar a una casa bonita y bien decorada. Con un poco de planificación y algunos trucos sencillos, es posible combinar estilo, funcionalidad y comodidad tanto para ti como para tus compañeros peludos. 

La clave en la decoración con mascotas es elegir los materiales adecuados, crear zonas seguras y tener en cuenta las necesidades de tus mascotas sin sacrificar el diseño. Para eso, te damos ideas prácticas con las que lograr una decoración armónica, resistente y pet-friendly.

Decorar con estilo cuando tienes perros o gatos sí es posible

La convivencia con animales implica ciertos ajustes, pero también abre la puerta a una decoración más viva, natural y acogedora. No se trata de esconder que tu mascota vive ahí, sino de integrarla de forma estética en tu hogar. 

Una manta bien elegida, una cama con un diseño bonito o una planta que no suponga ningún riesgo pueden transformar cualquier rincón sin que deje de ser funcional. La decoración con mascotas puede (y debe) ser una aliada de la comodidad y del estilo.

Sofá con funda lavable para convivir con perros y gato sin preocupaciones.

Elige materiales y muebles resistentes para vivir con tu mascota

Cuando compartes casa con animales, una elección correcta de materiales garantiza la durabilidad y el fácil mantenimiento de muebles, suelos y textiles. Algunos tejidos y superficies son más propensos a engancharse con las uñas, acumular pelo o absorber olores, mientras que otros resisten mejor el día a día sin perder su aspecto original.

Alimentos tóxicos comunes

Además de las plantas, algunos alimentos habituales en casa pueden ser muy peligrosos para perros y gatos. Entre los más tóxicos están el chocolate, las uvas y pasas, la cebolla, el ajo, el aguacate y los edulcorantes como el xilitol. Asegúrate de mantenerlos fuera de su alcance y evita dejarlos sobre mesas o encimeras accesibles. 

Tapicerías y telas “pet-friendly”

Opta por tejidos lavables, resistentes y que no retengan pelos fácilmente. Los más recomendables son el jacquard, la microfibra, el terciopelo sintético o las telas tipo aquaclean, que permiten limpiar manchas con un paño húmedo. Evita las tapicerías muy rugosas, como el lino puro o ciertos tipos de algodón, ya que pueden engancharse con las uñas o deteriorarse antes de tiempo. Los colores intermedios, como grises o tierras, disimulan mejor los restos de pelo.

Muebles resistentes a arañazos y mordidas

Si tu mascota es de las que muerde esquinas o rasca superficies, elige muebles de madera maciza, metal pintado o ratán sintético (más duradero que el natural). Las patas de sofá, mesas o sillas pueden protegerse con fundas o bandas de silicona en la etapa de cachorro. En espacios comunes, los muebles con bordes redondeados son más seguros tanto para humanos como para animales.

Muebles de madera y fibras naturales, resistentes y fáciles de mantener con mascotas.

Zonas seguras y cómodas para tu mascota

Además del mobiliario general, es importante destinar ciertos espacios a la comodidad de tu mascota. No tienen que romper con la estética de la casa: al contrario, puedes integrarlos con estilo y armonía.

Camas y mantas que combinen con la decoración

Hoy en día existen camas para mascotas con diseño cuidado, en tejidos naturales, tonos neutros o estampados elegantes. Si no quieres renunciar al estilo, busca modelos que encajen con tu paleta de colores y tipo de mobiliario. También puedes añadir mantas suaves o cojines desenfundables, que protegen sofás y camas sin desentonar con el resto de la decoración.

Rincones de descanso con buena ventilación

Elige zonas tranquilas, luminosas y bien ventiladas para colocar la cama o la zona de descanso de tu mascota. Evita lugares de paso o demasiado ruidosos, ya que los animales también necesitan su espacio de calma. Una buena idea es colocar su cama junto a una planta decorativa (segura, por supuesto) para integrar mejor ese rincón en el ambiente general del hogar.

Evitar alfombras demasiado delicadas

Las alfombras pueden dar calidez al hogar, pero conviene evitar aquellas que son demasiado gruesas, de lana natural o con muchos relieves. Opta por modelos de fibras sintéticas lavables, yute tratado o algodón de bajo pelo, que son más fáciles de limpiar y menos propensos a acumular pelos. Los tonos naturales, beiges o grises siguen siendo los más prácticos y versátiles.

Crea un rincón pet-friendly con cama cómoda y comedero integrado, orden garantizado.

Plantas decorativas seguras para mascotas

Las plantas dan vida a cualquier casa, pero si vives con perros o gatos es fundamental informarte bien antes de incorporarlas. Muchas plantas comunes pueden resultar tóxicas si se ingieren y no siempre es fácil mantenerlas fuera de su alcance. Afortunadamente, hay opciones seguras, bonitas y perfectas para decorar.

Plantas no tóxicas para perros y gatos 

Estas son algunas plantas decorativas que no representan peligro para tus mascotas y que, además, aportan frescura y belleza al hogar:

  • Calatea: con hojas elegantes y gran variedad de colores, ideal para interiores con luz indirecta.
  • Helecho de Boston: frondoso y colgante, perfecto para estanterías o macetas suspendidas.
  • Palma areca: resistente, elegante y segura, ideal para aportar un aire tropical.
  • Maranta (planta oración): colorida, compacta y segura para gatos y perros.

Estas plantas pueden colocarse en macetas de cerámica decorativa o en cubremacetas de fibras naturales, según el estilo de tu hogar.

Lista de plantas que debes evitar

Algunas de las plantas más populares en decoración pueden ser tóxicas si tus mascotas las mastican o ingieren. Estas son algunas que es mejor evitar o colocar fuera de su alcance:

  • Lirio (Lilium y Hemerocallis): altamente tóxico para gatos.
  • Potos y filodendros: comunes pero irritantes para el sistema digestivo.
  • Sansevieria (lengua de suegra): puede causar vómitos si se ingiere.
  • Crotón, ciclamen o dieffenbachia: todas potencialmente peligrosas.

Vivir con mascotas y tener una casa bonita no están reñidos. Con unos pocos ajustes y una mirada práctica al diseño, puedes lograr un hogar cómodo, funcional y lleno de estilo, donde todos los miembros de la familia —peludos incluidos— se sientan bienvenidos. Las plantas, los materiales resistentes y los detalles bien pensados serán tus mejores aliados para conseguirlo.